miércoles, 2 de marzo de 2011

Un remedio para el alma

 Las maravillosas calas


¿Quién no se ha tentado con pintar las calas? Pues yo creo que ningún pintor.
Yo también caí bajo la seducción de estas humildes flores que guardan tanta belleza. Difíciles de pintar para que no queden "tiesas", pero si lo logras, son un deleite para tus ojos y apostaría que también son un remedio para el alma.
Hoy quiero compartir este cuadro contigo, Irene, que se que te gusta mucho.

3 comentarios:

  1. hola Ines

    hermosos los cuadros que muestras como los que enviaste como saludos de navidad.
    admiro una vez mas tu arte yenvidio sanamente
    ese hermoso don que Dios te dio. no podria decir cual me gusto mas. espero algundia llegar a tu casa para recoger el retrato de Nicole
    un abrazo de tu amiga .


    Zaida.

    ResponderEliminar
  2. Hola Inés:
    Es un honor que compartas conmigo estas maravillosas Calas y por ello quiero darte las gracias, me ha emocionado...
    En cuanto a la leyenda, "chapó", breve pero con mucho arte, ese ARTE que Dios te ha dado.
    Sigue enseñando tus obras al mundo, a través de esta ventana espero poder verlas muchos años, aunque estemos lejos en la distancia un trocito de mi corazón está siempre contigo.
    Un beso prima.

    Irene

    ResponderEliminar
  3. Estos lindos momentos en que recibo las palabras amorosas de quienes me conocen o que solo han visto mis pinturas, son el mejor regalo que recibo gracias "la pintura". Ella me ha dado grandes emociones, esta es una de ellas

    ResponderEliminar